Dra. Maribel Flores Martínez
Consultorio Ginecológico / Blvd. Juárez No. 90 - Int. 101, Col. Las Palmas, Cuernavaca, Mor.
El parto humano, también llamado nacimiento, es la culminación del embarazo humano, el periodo de salida del bebé del útero materno.
Es considerado por muchos el inicio de la vida de una persona. La edad de un individuo se define por este suceso en muchas culturas.
Se considera que una mujer inicia el parto con la aparición de contracciones uterinas regulares, que aumentan en intensidad y frecuencia,
acompañadas de cambios fisiológicos en el cuello uterino.
El proceso del parto humano natural se categoriza en tres fases: el
borramiento y dilatación del cuello uterino, el descenso y nacimiento del bebé y el alumbramiento de la placenta. El parto puede verse
asistido con medicamentos como ciertos anestésicos o la oxitocina, utilizada ante complicaciones de retraso grave de alumbramiento.
Junto con la episiotomía (incisión quirúrgica en la zona del perineo), todo esto no debe hacerse nunca de manera rutinaria, ya que
el parto más seguro es el que evoluciona espontáneamente y en el que no se interviene innecesariamente. En algunos embarazos catalogados
como de riesgo elevado para la madre o el feto, el nacimiento ocurre por cesárea: la extracción del bebé a través de una incisión
quirúrgica en el abdomen.
En el parto natural, el bebé nace cruzando por la vagina de la madre, con la asistencia de poca o ninguna
tecnología y sin la ayuda de fármacos. En la mayoría de los centros asistenciales el parto vaginal ocurre en una posición ginecológica,
con la gestante en posición decúbito dorsal, es decir, acostada sobre su espalda y sus pies sostenidos a la altura de los glúteos
con el objetivo de favorecer la comodidad del personal médico. Se conoce con el nombre de posición de litotomía, y ha sido usada durante
años como rutina en el nacimiento. Sin embargo, es una posición controvertida, pues el parto puede ocurrir naturalmente en posición
vertical —por ejemplo agachada— en el cual la gravedad ayuda a la salida natural del niño. En la litotomía existe más probabilidad
de descensos lentos, expulsivos prolongados, sufrimiento fetal y desgarros perineales maternos. Idealmente, el entorno de la madre
en el momento del parto debería ser de tranquilidad, sin prisas, intimidad y confianza: luz suave, pocas personas y pertenecientes
a su entorno íntimo, una posición cómoda elegida por ella, tal vez música o flores o aromas si a ella le gustan. También existe el
parto en agua caliente, en el propio hogar, en hospitales o en centros privados.
Se desconocen cuáles son las causas que precipitan
el parto, pero se cree que determinadas sustancias producidas por la placenta, la madre o el feto, y de factores mecánicos como el
tamaño del bebé y su efecto sobre el músculo uterino contribuyen al parto. Por lo tanto los efectos coordinados de todos estos factores
son probablemente la causa de la aparición del trabajo del parto.
Se habla de inicio del parto cuando se conjugan varias situaciones
como son las contracciones uterinas, el borramiento (o acortamiento de la longitud del cervix) y la dilatación del cuello uterino.
La fase activa del parto suele iniciarse a partir de los 4 cm de dilatación del cuello uterino.
La tasa de mortalidad materna
sin asistencia médica (que incluye el embarazo, parto y puerperio, siendo el parto el momento de mayor riesgo) es de alrededor de
1 en 150. Por su parte, la tasa de mortalidad neonatal sin asistencia médica es mucho mayor y a tasa de morbilidad para ambos, es
decir, enfermedad y secuelas, es evidentemente aún más elevada. Esto se constata observando las estadísticas históricas previas a
la introducción de las técnicas de asepsia y antisepsia, así como el uso de líquidos intravenosos, transfusiones, antibióticos, oxitocina,
antihipertensivos, cirugía y muchos otros procedimientos médicos.
Texto tomado de Wikipedia